Se agotaron antes de que siquiera tuvieras oportunidad de intentarlo
El peor miedo de todos quienes vamos a los conciertos: entrar a la página y leer “Boletos no disponibles”. “¿Cómo es que más de 50 mil boletos se agotaron en unos segundos?”, uno de los grandes misterios de nuestros tiempos.
Se va el internet
Solo unos minutos antes de que empiece la venta te das cuenta que se fue la luz o el internet. Uno de esos momentos en los que crees que el universo está conspirando contra ti.
Alguien te interrumpe
Estás frente a tu computadora con tarjeta en mano y todo listo cuando suena el timbre o tu mamá, o quien sea, te llama para que le hagas un favor. Es ahí cuando realmente quisieras vivir apartado en las montañas, pero claro, con una buena conexión a internet.
La página ya no carga
Algo que no se lo deseas ni a tu peor enemigo. Una interminable espera que la mayoría de las veces no sirve para nada y solo te deja desilusionado.
Revisas la orden muchas veces por si hay algún error
Seguro siempre antes de finalizar tu orden la repasas 4475849 veces por si te equivocaste de fecha, de foro, los datos de envío o cualquier otra cosa. Incluso sueles esperar a los últimos segundos del contador para finalmente comprarlos.
Lee también: El tipo de fan que eres de acuerdo a la forma en que compras los boletos del concierto
La tarjeta no pasa
Justo cuando ya estás celebrando que lograste comprar los boletos te llega una notificación de que el pago no puso ser procesado debido a un problema con tu tarjeta bancaria. Hora de llorar.
Se te olvidó comprar para alguien que te había pedido
¿Qué tal que lograste superar todos los obstáculos anteriores solo para darte cuenta de que te faltó comprar un boleto? Vuelves a entrar y ya no hay disponibles. Decirle a esa persona que se quedó sin entrada será lo más difícil que harás en tu vida.